El hecho ocurrió en la finca Villa Rosita, ubicada en la vereda Pava de Santa Isabel, donde llegaron algunos ‘pillos’ y sacrificaron siete vacas.
Los propietarios de los animales reportan pérdidas superiores a los 20 millones de pesos. Las autoridades adelantan para dar con los responsables del hecho, además, piden a los pobladores abstenerse de comprar esta carne ya que pueden resultar afectados toda vez que el producto no cumple con el tratamiento correcto.